Las Dos Torres, la segunda entrega de El Señor de los Anillos de J.R.R. Tolkien, publicada en 1954, es una obra maestra que profundiza en la épica de la Tierra Media con una narrativa rica y compleja. Sin embargo, su título ha generado un debate que persiste entre los fans incluso en 2025: ¿A qué dos torres se refería Tolkien en El Señor de los Anillos? ¿Orthanc y Cirith Ungol o Minas Morgul y Orthanc? Este enigma, alimentado por la ambigüedad del propio Tolkien, refleja la genialidad de una obra que invita a la reflexión y la interpretación. Mientras las adaptaciones de Peter Jackson y debates en X mantienen viva la discusión, explorar las posibles respuestas no solo aclara el título, sino que ensalza la profundidad de Las Dos Torres como pilar de El Señor de los Anillos.
El contexto narrativo de Las Dos Torres
Las Dos Torres abarca un momento crítico en la saga: la Comunidad del Anillo se ha roto, Frodo y Sam avanzan hacia Mordor, mientras Aragorn, Legolas, Gimli y los demás se enfrentan a las fuerzas de Saruman y Sauron. El libro se divide en dos partes: la primera sigue la guerra en Rohan y el asedio a Isengard, donde Orthanc, la torre de Saruman, es central; la segunda acompaña a Frodo y Sam en su viaje, que culmina en la captura de Frodo por los orcos en Cirith Ungol. Minas Morgul, la fortaleza de los Nazgûl, también aparece como un símbolo del poder de Sauron. El título, elegido por Tolkien tras dividir su obra en tres volúmenes, parece aludir a dos fortalezas clave, pero su vaguedad ha desatado especulaciones.
Tolkien, un perfeccionista obsesionado con la coherencia de su mundo, dejó pistas contradictorias. En una carta, sugirió que las torres eran Orthanc y Barad-dûr, la fortaleza de Sauron, representando las fuerzas aliadas de Saruman y Sauron. Sin embargo, en notas editoriales, mencionó Orthanc y Minas Morgul como posibles candidatas. Esta ambigüedad ha llevado a los fans a debatir si el título es narrativo, simbólico o simplemente una elección editorial. Analizar las torres en el contexto del libro ofrece respuestas, pero también celebra la riqueza de una obra que sigue inspirando preguntas.
Orthanc y Cirith Ungol: la narrativa estructural
La interpretación más aceptada, respaldada por la estructura de Las Dos Torres, apunta a Orthanc y Cirith Ungol. Orthanc, en Isengard, es el eje de la primera mitad del libro. Saruman, desde su torre de obsidiana, desata su ejército de uruk-hai contra Rohan, y su derrota en el Abismo de Helm y la caída de Isengard marcan un punto de inflexión. La torre, descrita como una “aguja negra” impenetrable, simboliza la traición de Saruman y su alianza con Sauron. Su presencia domina la narrativa de Aragorn, Merry y Pippin, culminando en la intervención de los ents.
Cirith Ungol, por su parte, es el clímax de la segunda mitad. Esta torre, situada en el paso a Mordor y custodiada por orcos y el bástago de Ungoliant, Ella-Laraña, representa el peligro mortal que enfrentan Frodo y Sam. La captura de Frodo en Cirith Ungol, tras la traición de Gollum, es uno de los momentos más oscuros de la saga, y la torre, con su aura de terror, encarna la amenaza de Sauron. El contraste entre Orthanc, una fortaleza de ambición humana, y Cirith Ungol, un bastión del mal puro, refleja los dos frentes de la guerra en Las Dos Torres. Esta lectura, popular en foros como X, se alinea con la división narrativa del libro, porque no hemos de olvidar, que en los libros todo lo acontecido en Cirith Ungol y en la guarida de Ella-Laraña, ocurre en Las Dos Torres, y no en El Retorno del Rey, como vemos en las películas.
Orthanc y Minas Morgul: el simbolismo del mal
Una interpretación alternativa, defendida por algunos estudiosos, señala a Orthanc y Minas Morgul. Minas Morgul, la antigua Minas Ithil convertida en una ciudadela espectral por los Nazgûl, aparece en la segunda mitad como un símbolo del poder de Sauron. Su luz verdosa y su atmósfera de muerte la convierten en una contraparte visual de Orthanc, ambas torres representando la alianza entre Saruman y Sauron. En una escena clave de El Retorno del Rey, Frodo, Sam y Gollum observan un ejército salir de Minas Morgul hacia la guerra, subrayando su importancia estratégica.
Esta teoría, apoyada por las notas de Tolkien que mencionan Minas Morgul, ve el título como una metáfora del eje del mal que amenaza la Tierra Media. Orthanc y Minas Morgul, como fortalezas visibles en el libro, contrastan con Barad-dûr, que permanece en segundo plano hasta El Retorno del Rey. Sin embargo, esta lectura tiene un inconveniente: Minas Morgul, aunque poderosa, no es el clímax de la narrativa de Frodo y Sam, que se centra en Cirith Ungol. Esto ha llevado a algunos fans a preferir la primera interpretación, aunque la ambigüedad de Tolkien permite ambas.
Cabe destacar que, en las ediciones en castellano en tres volúmenes de El Señor de los Anillos (al menos en la de 1977 y en las de bolsillo), el primer libro termina con las siguientes frases:
«Aquí concluye la primera parte de la historia de la Guerra del Anillo.
La segunda parte tiene como título LAS DOS TORRES, ya que los acontecimientos ahí relatados están bajo el dominio de Orthanc, la ciudadela de Saruman, y la fortaleza de Minas Morgul que guarda la entrada secreta de Mordor; en ella se cuentan las hazañas y peligros de todos los miembros de la Comunidad ahora disuelta, hasta la llegada de la Gran Oscuridad.
La tercera parte, EL RETORNO DEL REY, habla de la última defensa contra la Sombra, y el fin de la misión del Portador del Anillo.»
Orthanc y Minas Morgul o Cirith Ungol, ¿Cuál de las dos torres es la más correcta?
La falta de una respuesta definitiva es parte del encanto de Las Dos Torres. Tolkien, consciente de la complejidad de su mundo, dejó el título abierto a interpretación, invitando a los lectores a explorar la Tierra Media desde diferentes ángulos. Orthanc y Cirith Ungol destacan por su relevancia narrativa, mientras Orthanc y Minas Morgul resuenan por su simbolismo. Incluso la mención de Barad-dûr en las cartas de Tolkien añade una capa de profundidad, sugiriendo que las torres representan una alianza más amplia del mal.
La película de Peter Jackson (2002), que enfatiza Orthanc y Minas Morgul en su imaginería, ha influido en la percepción popular, pero no resuelve el debate de forma definitiva. En 2025, los fans en X siguen discutiendo, con hashtags como #LasDosTorres trending cada vez que surge una nueva teoría. Esta vitalidad demuestra por qué El Señor de los Anillos sigue siendo un pilar de la fantasía: su riqueza permite lecturas infinitas.
En La Gloria de Gondor, nos decantamos más por la coherencia argumental que Cirith Ungol tiene en los libros. Y es por ello, que consideramos que las dos torres a las que se refiere Tolkien son Orthanc y Cirith Ungol, no Minas Morgul.
Las Dos Torres a debate
Las Dos Torres no solo es un libro; es un testimonio del genio de Tolkien para crear mundos que desafían y emocionan. El debate sobre las torres —Orthanc y Cirith Ungol o Minas Morgul— no tiene una respuesta única, pero eso es lo que hace a la obra inmortal. Cada interpretación revela una faceta de la Tierra Media, desde la lucha heroica hasta la sombra del mal. Mientras nuevas generaciones descubren El Señor de los Anillos, el enigma de las torres seguirá inspirando debates, recordándonos que la grandeza de Tolkien radica en su capacidad para hacernos soñar, cuestionar y maravillarnos.