Isildur, hijo de Elendil, es uno de los personajes más importantes y complejos del legendarium de J.R.R. Tolkien. Nació en Númenor en el año 3209 de la Segunda Edad, en la ciudad de Armenelos. Isildur era el primogénito de Elendil y tenía un hermano menor, Anárion. Su linaje provenía de la casa de Elros, el primer rey de Númenor, lo que le otorgaba una longevidad considerable y una gran estatura, características de los Dúnedain.
La Caída de Númenor
Durante la decadencia de Númenor, cuando el rey Ar-Pharazôn se dejó seducir por Sauron, Isildur demostró su valentía al infiltrarse en el templo de Morgoth, construido por Sauron, para rescatar un fruto del Árbol Blanco, Nimloth. Este árbol era un símbolo de la amistad entre Númenor y los Elfos, y Sauron había ordenado su destrucción. Isildur, disfrazado, logró obtener un fruto del árbol, aunque resultó gravemente herido en el proceso. Sin embargo, plantó el fruto y de él brotó un nuevo Árbol Blanco, preservando así un símbolo crucial de la herencia de Númenor.
Cuando Númenor fue destruida por la ira de Eru Ilúvatar, Elendil y sus hijos lograron escapar gracias a la previsión y las naves que habían preparado. Llegaron a las costas de la Tierra Media y fundaron los reinos de Arnor y Gondor. Elendil se estableció en el norte, en Arnor, mientras que Isildur y Anárion fundaron Gondor en el sur.
La Última Alianza y la Guerra contra Sauron
Durante la Segunda Edad, Sauron había retomado gran parte de su poder y construyó Barad-dûr en Mordor. Los hombres de Númenor, liderados por Elendil y sus hijos, junto con Gil-galad, el rey de los elfos, formaron la Última Alianza de Elfos y Hombres para enfrentar a Sauron. La batalla culminante tuvo lugar en la llanura de Dagorlad, frente a la Puerta Negra de Mordor, y finalmente, en los campos de la misma Barad-dûr.
En esta guerra, Anárion fue asesinado por un proyectil durante el asedio a Barad-dûr. Elendil y Gil-galad enfrentaron a Sauron directamente. En el combate, tanto Elendil como Gil-galad murieron, pero Elendil, al caer, rompió su espada Narsil. Isildur, en un acto de desesperación y valentía, tomó la empuñadura rota de Narsil y cortó el Anillo Único de la mano de Sauron, destruyendo temporalmente su forma física y dispersando su espíritu.
El Anillo Único y la Desdicha de Isildur
Después de la derrota de Sauron, Isildur tomó el Anillo Único como botín y decidió no destruirlo, a pesar de los consejos de Elrond y Círdan, que le instaban a lanzarlo al fuego del Monte del Destino. Isildur quedó cautivado por el poder del Anillo y su decisión tuvo consecuencias fatales no solo para él, sino también para toda la Tierra Media.
Isildur regresó a Gondor y plantó un nuevo Árbol Blanco en Minas Ithil (posteriormente Minas Morgul) en memoria de su hermano. Luego, decidió viajar hacia el norte para reclamar el trono de Arnor. Durante su viaje, su comitiva fue emboscada por un gran grupo de orcos en los Campos Gladios, cerca del Gran Río Anduin.
La Emboscada en los Campos Gladios
En esta emboscada, los orcos masacraron a la mayoría de los hombres de Isildur. En un intento desesperado por salvarse, Isildur se puso el Anillo Único y trató de escapar. Sin embargo, el Anillo lo traicionó y se deslizó de su dedo mientras cruzaba el río Anduin, dejándolo visible para sus enemigos. Fue alcanzado por flechas y pereció en las aguas del río. El Anillo se perdió en el fondo del Anduin, donde permanecería oculto por más de dos mil años hasta que fue encontrado por Déagol, un pariente de Sméagol, quien se convertiría en Gollum.
Legado de Isildur
El legado de Isildur es ambivalente. Por un lado, es recordado como un gran héroe que venció a Sauron y salvó a la Tierra Media de su tiranía por un tiempo. Por otro lado, su fracaso al no destruir el Anillo Único dejó a la Tierra Media vulnerable a la futura amenaza de Sauron. Su linaje continuó a través de los reyes de Arnor y Gondor, aunque ambos reinos eventualmente cayeron en decadencia. Sin embargo, la línea de Isildur perduró y culminó en Aragorn, quien finalmente destruyó el Anillo Único y restauró la paz y la prosperidad en la Tierra Media al final de la Tercera Edad.
Isildur es un personaje trágico cuya vida y decisiones tuvieron repercusiones profundas y duraderas en la historia de la Tierra Media. Su valentía, su debilidad y su legado forman una parte integral del vasto y complejo mundo creado por Tolkien.