La belleza de Dios es infinita y hay innumerables maneras de compartirla con quienes la buscan. Un grupo de personas en Granada, compuesto por hombres, mujeres y niños de diferentes edades, ha elegido evangelizar a través de la música y el teatro. Este grupo especial se llama Erukoa, que en élfico significa «Casa de Dios», y está formado por casi un centenar de elfos y humanos.
‘El Silmarillion’ busca trasmitir a los espectadores que siempre va a haber conflicto, sinsabores y épocas en las que la vida sea más complicada, pero a pesar de esto, «siempre hay que luchar»
Este grupo ha creado el primer musical basado en «El Silmarillion», la obra de J.R.R. Tolkien que narra la génesis de la Tierra Media. Tolkien, conocido por su profunda fe católica, solía evangelizar mediante sus obras, sin mencionar directamente a Dios.
El musical fue escrito y compuesto íntegramente por Pilar Martín Madrid, profesora del Centro de Magisterio La Inmaculada. Pilar descubrió en sí misma una nueva faceta, ya que nunca antes había compuesto música. Según ella, la inspiración venía al seleccionar el texto, imaginando la música en su mente. Más de cien voluntarios han contribuido con su esfuerzo a este proyecto único, sin gastar dinero. Rocío Cerezuela, la directora de escena, se encargó de transformar el texto y la música en algo visual. Babette Bahier, del equipo de vestuario, creó los trajes maravillosos que llevan los actores, usando telas, colchas y ropa de cama donadas. Isabel Ortiz diseñó cada detalle conceptual de la obra, convirtiendo todo en arte.
La idea de este musical nació una noche de verano en 2016
Después de más de dos años de ensayos, la obra se estrenó el cinco de julio de 2019. Sin embargo, la pandemia obligó a suspender los ensayos hasta el año pasado, cuando la obra fue reestrenada. Actualmente, solo el 15% de los participantes originales continúan en el proyecto.
El 29 de junio se llevará a cabo la quinta y última función, a las 20:30 horas, en el Palacio de Congresos de Granada. Esta será la última oportunidad para ver el único musical basado en «El Silmarillion». Miguel Ángel Morell, párroco de la iglesia de Virgen de Gracia y productor de la obra, invita a todos a asistir a esta representación única, enfatizando que «el objetivo no es convertir a nadie, sino compartir la belleza, que puede unir a todas las personas, independientemente de sus creencias».
Algunos jóvenes participantes, provenientes de familias ateas, han comenzado a creer en Dios gracias a su participación en el musical
Emocionado, Morell nos cuenta que algunas escenas y mensajes de la obra pueden aplicarse a la vida diaria. «Siempre existe una lucha del bien contra el mal», explica el párroco. Por ello, al final de la obra, los actores se unen y piden ayuda, proclamando que una última guerra deberá librarse. Con estas palabras, intentan transmitir a los espectadores que siempre habrá conflictos y momentos difíciles, pero a pesar de ello, «siempre hay que luchar».